Sola es como lució la zona de los Arcos de Zapopan, en el municipio homónimo durante este año de la tradicional Romería.
Pese a las vallas de seguridad, había pocos fieles que acudían para pagar una manda como la señora Mary, quien mencionaba: “es una manda que mi esposo quedó debiendo, él ya falleció y vine yo en su lugar a pagarla”.
Acuden a pagar mandas
Ella acudió a la Catedral de Guadalajara para iniciar con su recorrido a las 4 de la mañana y llegó hasta los Arcos de Zapopan a las 7 de la mañana, inclinándose ante lo cercado de la zona que fue lo más cerca que pudo apreciar a La Generala.
Dentro de los Arcos de Zapopan ya esperaban a la Virgen algunos representantes de las danzas que año con año acompañan en su caminar a la madre de Jalisco, aunque no fue hasta cerca de las 9 y media de la mañana cuando llegó la imagen de La generala abordo de su carruaje para ser puesta en la andadera que la llevaría hasta su casa en la Basílica de Zapopan.