Lagunas en la reforma al Poder Judicial tienen un impacto muy limitado
Para que un presunto delincuente se quede en la cárcel, no basta solo con detenerlo. Es indispensable que policías y ministerios públicos hagan adecuadamente su trabajo.
Para que un presunto delincuente se quede en la cárcel, no basta solo con detenerlo. Es indispensable que policías y ministerios públicos hagan adecuadamente su trabajo.
Es decir, que se apeguen a los procedimientos que les marca la ley. Si no lo hacen, la probabilidad de que un detenido sea liberado es muy alta, algo de lo que casi siempre se termina culpando al juez bajo sospecha de corrupción.
Luis: “No es cierto que se proteja a nadie. Simplemente, si no se hacen los trabajos adecuados por la policía y el ministerio público, los jueces van a tener que cumplir con su deber, que es cuidar los derechos de las personas, les guste o no les guste”.
Para el ministro Luis María Aguilar Morales, esta es otra de las lagunas de la llamada reforma judicial, que está próxima a discutirse. Una reforma que, de aprobarse en sus términos, dice, va en detrimento de la calidad en la administración de la justicia.
Luis: “Nos va a llevar a elegir a gentes que no necesariamente van a ser los mejores y, peor, que pueden tener incluso compromisos políticos con quienes los apoyaron en sus campañas para llegar a ser jueces, magistrados o ministros. Y si no son independientes, no le sirven al pueblo de México”.
El ministro Aguilar va más allá. La reforma, dice, le quitará al ciudadano un instrumento de defensa confiable ante cualquier abuso de autoridad.
Luis: “Los jueces federales lo que hacen o hacemos es defender a la gente frente a la autoridad, a cualquier autoridad. Si la autoridad está abusando en sus actos y cualquiera de los actos que pueda emitir, desde un cobro de predial hasta emitir una ley, esas autoridades pueden ser demandadas ante los tribunales federales”.
El ministro Luis María Aguilar expuso estas precisiones durante un foro organizado por una asociación civil e invitó a diputados y senadores a actuar con conciencia para no dañar a quienes dicen defender.