Imagina que vas a comer una tortita ahogada , un pozolito, o una carnita asada con sus frijolitos, cebollitas asadas y nopales, pero ¿qué vas a tomar? ¿Un refresco o agua?
Esta pregunta es básica hasta en los puestos de comida con refresco o agua, y la respuesta suele ser simple: un refresco.
Esta decisión está influenciada por múltiples factores, desde culturales hasta gastronómicos.
Te puede interesar: Con este hack puedes enfriar tus bebidas en un dos por tres
De acuerdo con la profesora de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Ana Ortega Ávila, explicó que el alto consumo de bebidas ultra industrializadas tiene componentes culturales, así como económicos debido a los tratados comerciales y la introducción de corporaciones transnacionales al mercado mexicano.
Mientras que para Gyorgy Scrinis, de la Universidad de Melbourne, Australia, el consumir refrescos representa un estilo de vida al que se aspira llegar, además claro del sabor de los refrescos.
Te puede interesar: VIDEO: Hombre utiliza un refresco para apagar un incendio… ¡Y FUNCIONA!
¿Qué problemas a la salud causan los refrescos?
El consumo elevado de refrescos podría derivar en diversos problemas de salud como: obesidad y sobrepeso; diabetes; enfermedades cardiovasculares; resistencia a la insulina; caries dental; problemas hepáticos; y dependencia al azúcar.
Recomendaciones para prevenir la diabetes