Sobreviviente de accidente en Catedral de Guadalajara relata su experiencia
Se siguen recuperando favorablemente los lesionados del accidente ocurrido en Catedral; uno de los sobrevivientes habló para Fuerza Informativa Azteca.
“Estamos agradecidos, estamos contentos por el regalo que Dios nos dio, pero fue una experiencia inolvidable, y también una experiencia que te abre mucho los ojos y nos da ganas de vivir y de seguir echándole ganas a la vida”, expresó Eduardo Álvarez, quien sobrevivió al accidente masivo en Catedral.
Son las palabras de Eduardo, quien, al igual que otras 15 personas, sobrevivió al accidente masivo en Catedral. A días de este insólito suceso y pese a sus heridas y quemaduras en todo el cuerpo, su estado de salud es favorable. Eduardo compartió para Fuerza Informativa Azteca lo que ocurrió ese día, justo cuando el contingente al que pertenece realizaba actividades religiosas.
“Volteo a ver atrás y lo primero que vi fue la camioneta. Acto seguido, pierdo la conciencia y despierto debajo de la camioneta. Mi cadera quedó prensada en la suspensión de la camioneta. No estaba sobre la llanta, yo estaba a unos 10-15 cm hacia atrás; entonces, mi cabeza sobresalía y podía ver todo”, relató Eduardo Álvarez, quien sobrevivió al accidente masivo en Catedral.
El joven, quien mantiene un proceso acelerado de recuperación, asegura que el hombre que robó el vehículo sí intentaba huir de la Catedral, a pesar de que varias personas estaban debajo de las llantas:
“A mí me tocó ver cuando el conductor aceleraba a fondo. Escuchaba el motor, el ruido. Yo estaba un poquito estresado y vi cómo me hizo esta quemadura, porque además estaba haciendo fuerza con la dirección. El peso de la llanta sobre mi estómago, especialmente sobre mis piernas, me estaba lastimando. Hasta que lograron bajar al conductor fue que pude descansar dentro de lo que cabe”, comentó Eduardo Álvarez, sobreviviente del accidente en Catedral.
Eduardo y sus compañeros ya compararon ante el Ministerio Público para que el causante quede tras las rejas y las investigaciones que lleva a cabo la Fiscalía de Jalisco sigan su curso.
“Estoy muy agradecido de que a la persona le perdonaran la vida, o sea, no lo lincharon, pero creo que sí debe haber un proceso legal y debe haber consecuencias para esa persona”, afirmó Eduardo Álvarez.
De las cuatro personas que aún permanecían hospitalizadas, solo dos mujeres continúan en estado crítico de salud, en específico una adolescente de 14 años, quien deberá someterse a una intervención quirúrgica por una grave lesión en la cabeza. Para Eduardo, esta experiencia es prueba de que los milagros y las segundas oportunidades sí existen.