Minutos intensos de vida o muerte: Eunicie, policía de Tlaquepaque relata cómo salvó a una niña de 2 años

Los buenos son más. Fueron ocho largos minutos lo que Eunice Hernández, policía de San Pedro Tlaquepaque, estuvo brindando primeros auxilios a Noemí, una pequeñita de dos años que llegó a la Cruz Verde La Guadalupana con dificultades para respirar. Esa noche, la unidad no estaba en servicio debido a que había sido fumigada.

“Como a las nueve treinta y cinco, aproximadamente, llega un vehículo y desciende una femenina con un bebé en brazos, pidiendo auxilio, gritando, desesperada, que su niña ya no respondía. Salí yo, su servidora, a apoyarlas. Viendo la situación y la preocupación de la madre, abracé a la niña, le di los primeros auxilios; la volteé boca abajo y empecé a pegarle en su espaldita. Después corrí a la sala de shock a darle el. RCP boca a boca. No sé, fueron de seis minutos. La niña respondió llorando, y fue una satisfacción, como oficial, ayudar a la persona”, relató Eunice Hernández, policía de Tlaquepaque.

Eunice describe como eternos los minutos que tuvo en brazos a Noemí, con su madre llorando desesperada a un lado. Sin embargo, asegura que la adrenalina del momento no la dejó pensar en nada más que en salvar a la pequeña, logrando que recuperara la conciencia.

“Abrazarla y calmarla para que estuviera bien con su familia. Se la di a su mamá y ellas empezaron a llorar. ‘Que muchas gracias, oficial’, me dijeron”, añadió Eunice Hernández, policía de Tlaquepaque.

La pequeña, al ser reanimada, fue trasladada al Hospital Civil para una atención más especializada, ya que la madre refería que minutos antes había sufrido convulsiones. Eunice asegura que, durante sus 22 años de labor, esta no es la única vez que ha tenido la oportunidad de salvar vidas, pues el año pasado le brindó primeros auxilios a una pequeña de ocho meses en esta misma unidad médica. Agrega que ha recibido capacitación en defensa personal y primeros auxilios.