Detienen en Ciudad Juárez a presunto feminicida de Areli Guadalupe en Zapopan

A casi dos meses del asesinato, elementos de la Policía de Investigación de la Fiscalía Especializada en Operaciones Estratégicas lograron la detención de Miguel Ángel N. en el cruce de las calles Trébol y Abedul, en la colonia El Mezquital, en Ciudad Juárez, Chihuahua.

“Ya nos habían dado la información. Como estuvimos nosotros manejando, pidiendo apoyo, denunciando a través de las redes sociales, hubo gente que se estuvo comunicando con nosotros diciéndonos que estaba allá. Le pasamos la información a la Fiscalía. Yo, cuando me dieron la nota, en verdad que no accedí dentro de mí. Por un lado, me daba mucha felicidad; por otro lado, se me vinieron muchos recuerdos”, Salvador Ibarra, tío de Areli.

Este viernes, se llevó a cabo en los juzgados de control y juicio oral de Puente Grande, Jalisco, la audiencia de imputación en contra de Miguel Ángel N. como presunto implicado en el feminicidio de la joven.

Fue en la sala 5 donde el Ministerio Público informó al imputado cuál es el delito por el que se le investiga. Además, se le expusieron los hechos que se le atribuyen.

Ahí, familiares de Areli se vieron de frente con el presunto hombre que les cambió la vida y privó a uno de sus seres queridos.

“Yo hago responsable a las autoridades, que tienen que sacar este caso adelante. En este caso, el juez y los abogados que sí le den la máxima sentencia que requiere un feminicida de este tipo. Es un criminal en potencia y cada vez va rebasando sus propios límites. Es un tipo demasiado peligroso y yo sí exijo que quien tenga que dictar la sentencia aplique todo el peso de la ley”, Salvador Ibarra, tío de Areli.

Fueron alrededor de dos horas y media las que duró la audiencia de imputación, donde la defensa del imputado solicitó al juez la ampliación del término constitucional de 72 a 144 horas para el proceso de vinculación a proceso.

Familiares detallan que Areli conoció a Miguel Ángel al buscar una oportunidad de empleo en Estados Unidos. Le prometió hasta la ciudadanía de dicho país, cosa que jamás sucedió.

Areli dejó a dos infantes huérfanos de 10 y 8 años, y hoy sus familiares, por ellos, piden justicia.