¡Misión cumplida! Pensaron que este rescate nunca llegaría, pues aunque dicen que la esperanza es lo último que muere, la familia de esta tierna perrita disminuían cada vez más. Fue un mensaje de texto “milagroso” el que le avisó a Jeff Bohnert, dueño de la perrita que perdió a inicios de junio, que un grupo de buzos había estado en una cueva y habían localizado a una perrita con las características similares a las de Abby.
Aunque Bohnert dudó en el momento del mensaje, uno de los rescatistas le mostró una fotografía de la perrita, sin creerlo, Bohnert indicó que efectivamente se trataba de su perrita Abby, a la cual perdió hace dos meses. Según la historia del hombre, una mañana se dio cuenta que su mascota no estaba, por lo que se movilizó en redes sociales para comenzar su búsqueda, sin tener resultados en dos meses.
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Un grupo de buzos localiza a una perrita dentro de una cueva
Dos meses después de la desaparición de Abby, Gerry Keene y un grupo de personas decidieron entrar a la cueva Berome Moore en Missouri, Estados Unidos, con la finalidad de explorar la zona como día de diversión. Al entrar en ella, una de las personas logró ver a la perrita; “Estaba acostada, hecha bolita. Levantó la cabeza y nos miró, pero no respondió a las órdenes. Parecía que estaba a punto de morir”, mencionó un testigo.
Keene pidió ayuda a otro explorador para poder sacar a la perrita, cabe destacar que Abby fue bastante afortunada, pues Rick Haley, su rescatista, estaba entrenado para este tipo de situaciones. Sacar a la perrita de la cueva era algo complicado, pues eran 152 metros de profundidad y los pasillos eran estrechos y empinados. Pero los rescatistas decidieron colocar a la perrita en una cobija y luego la pusieron en una mochila para que fuera más fácil su traslado.
“Se mostró cooperativa; la trasladamos por una subida vertical muy complicada e incómoda, pasándola de mano en mano hacia la superficie”, menciona su rescatista. El rescate duró aproximadamente una hora y media, pero la perrita estaba sana y salva, además se puso muy contenta cuando se reencontró con su dueño. Lo más sorprendente es que Abby es una perrita adulta, pues está a semanas de cumplir 14 años y de alguna forma logró sobrevivir 60 días en una cueva con una temperatura de 14°C.
Tras ser rescatada, la pequeña Abby tuvo que recibir atención veterinaria, pues para sobrevivir perdió casi la mitad de su peso corporal y vivió bajo la lluvia algunos días. ¡Sin duda alguna toda una perrita luchona!
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