Mucho antes de que el reggae conquistara el mundo, una figura etíope se convertía en símbolo espiritual, político y cultural para miles de personas en Etiopía, Jamaica y pueblos afrodescendientes. Se trata de Haile Selassie I, emperador de Etiopía entre 1930 y 1974, quien no solo marcó la historia de su país, sino que inspiró una de las culturas más profundas y reconocibles en la historia del siglo XX: el movimiento Rastafari.
Te puede interesar: El reggae en México: Cómo llegó a Guadalajara y qué bandas 100% tapatías tienes que conocer sí o sí
¿Quién fue Haile Selassie?
Conocido como el Negus Negast: ¡Rey de reyes, Señor de señores. León conquistador de la tribu de Judá! Ras Tafari Makonnen ascendió al trono imperial de Etiopía en 1930 como Haile Selassie I, logró sacar a Etiopía de siglos de aislamiento y decadencia, iniciando un proceso de modernización que lo posicionó como una figura clave del siglo XX, tanto en África como en el escenario internacional.
¿Por qué se le considera un mesías a Haile Selassie?
En Jamaica, tras la coronación de Selassie, muchos creyeron que se trataba del cumplimiento de una profecía bíblica dicha -al menos 15 años antes- del suceso y que hablaba del regreso de un rey negro que redimiría a los descendientes de esclavos. Y no era para menos que Selassie perteneciera a una dinastía que, según la tradición etíope, desciende directamente del rey Salomón de Israel y de la Reina de Saba. Este linaje sagrado alimenta gran parte del misticismo en torno a su figura, especialmente dentro del movimiento Rastafari, que lo considera la encarnación viva de Dios en la Tierra .
¿Por qué Haile Selassie visitó México?
En 1954, Haile Selassie realizó una gira por América Latina y visitó oficialmente México. Fue recibido con honores por el entonces presidente Lázaro Cardenas. Esta visita simbolizó un puente entre dos naciones que compartían luchas contra la dominación extranjera. Además, reforzó la imagen de Selassie como un líder global en la defensa de los pueblos oprimidos.
En el contexto de la diplomacia internacional, Etiopía fue el primer país africano en establecer relaciones diplomáticas con México. Esta propuesta, hecha por el propio Selassie poco antes de la Segunda Guerra Mundial, dio inicio a un vínculo histórico entre ambos países, destacando la visión del emperador como un líder que buscaba abrir caminos y tender puentes hacia otras culturas.
Hoy, el movimiento Rastafari sigue vigente, no solo como una corriente espiritual, sino como una forma de resistencia ideológica, identidad cultural y amor profundo por la vida, la tierra y la libertad. Haile Selassie, aún después de su muerte, sigue guiando ese camino.
Te puede interesar: A 19 años de ‘Ahí Vamos’ de Gustavo Cerati: Las 5 canciones con más millones de reproducciones del álbum