El mundo de los juegos de mesa está lleno de clásicos que han perdurado con el tiempo, pero pocos tienen una historia tan intrigante y llena de confusiones como las Damas Chinas. A pesar de su nombre, este juego ni es de China ni es una variante de las damas. Su origen es mucho más curioso y nos lleva a través de distintas culturas, hasta convertirse en el pasatiempo que hoy conocemos.
Te podría interesar: ¿Bebeleche, avioncito, rayuela? Esta es la historia de uno de los juegos favoritos de la infancia
¿Damas Chinas, pero no de China?
Uno de los aspectos más sorprendentes de este juego es que no se originó en China. Fue inventado en Alemania a finales del siglo XIX. Su verdadero antecesor se llamaba “Stern-Halma”, una versión modificada del juego estadounidense “Halma”, creado en 1883 por el cirujano George Howard Monks en Boston.
El Halma original se jugaba en un tablero cuadrado y consistía en mover piezas de un extremo a otro, pero en 1892, la empresa Ravensburger en Alemania diseñó una variante sobre un tablero en forma de estrella de seis puntas. El nombre “Stern-Halma” significa “Halma estrella” en alemán, haciendo referencia a su característica forma.
¿Por qué se llama Damas Chinas?
Cuando el juego llegó a Estados Unidos en la década de 1920, la compañía Pressman & Co. decidió comercializarlo con un nombre más exótico para atraer la atención del público. Inspirados por la fascinación occidental por la cultura china, lo rebautizaron como “Chinese Checkers” (Damas Chinas), a pesar de que el juego no tenía relación alguna con China.
Este nuevo nombre hizo que se popularizara rápidamente en el mercado estadounidense, ya que evocaba un toque misterioso y oriental, lo que lo hacía más atractivo para los consumidores de la época.
¿Cómo se juega y por qué sigue vigente?
El juego es simple pero requiere estrategia y planificación. Se juega en un tablero con forma de estrella de seis puntas y puede haber entre dos y seis jugadores. Cada jugador tiene piezas de un color y el objetivo es moverlas de una esquina a la opuesta, saltando sobre las fichas de los oponentes para avanzar más rápido.
Su sencillez y la posibilidad de realizar jugadas ingeniosas lo han convertido en un juego ideal para todas las edades. A lo largo de los años, ha sido adaptado en versiones digitales y sigue siendo un clásico en reuniones familiares y competiciones amistosas.
¿Damas Chinas en la cultura popular?
Aunque no es tan famoso como el ajedrez o el go, las Damas Chinas han aparecido en diversas películas, series y hasta videojuegos. Su presencia en la cultura popular refuerza su lugar como uno de los juegos de mesa más icónicos del mundo.
Desde su inesperado origen en Alemania hasta su consolidación como un clásico, Damas Chinas es un ejemplo perfecto de cómo un simple cambio de nombre y diseño puede transformar un juego en un fenómeno global. La próxima vez que juegues, recuerda que estás participando en una historia de más de un siglo de evolución y tradición.
Te podría interesar: La Historia de la lotería Mexicana: ¿Fue creada por un francés?
Niñas y niños ya olvidaron los juguetes tradicionales
